Aircross 2.0 - Arnés de canicross de alto rendimiento

Evolución de nuestro emblemático Aircross, el arnés Aircross 2.0 ha sido rediseñado para corredores exigentes en canicross y skijoring. Ofrece mejoras notables en términos de estabilidad, ligereza y facilidad de ajuste.

Ya adoptado por los atletas del Team Inlandsis, ha demostrado su eficacia en los podios nacionales e internacionales durante más de un año.

Diseño centrado en el rendimiento

• Permite una zancada natural y amplia, maximizando la eficiencia en la carrera.
• Su diseño ergonómico asegura una distribución óptima de la tracción y baja el centro de gravedad, ofreciendo mayor comodidad y control.
• Los numerosos ajustes permiten un ajuste preciso para una colocación perfecta.
• La correa de tracción ajustable en longitud garantiza un deslizamiento fluido de la línea de tiro.

Características principales

• Punto de anclaje deslizante* para una mejor estabilidad
• Mosquetón Airlink: rotación de 360°, bloqueo automático, ultraligero (25 g), resistencia hasta 400 kg (1 perro máx)
• Bolsillo trasero (10 x 17 cm) para teléfono móvil o pequeños accesorios
• Peso: 190 g (talla S/M), diseñado para el rendimiento
• Forro interior transpirable para un confort óptimo
• Pasadores de aluminio 6061, robustos y ligeros
• Correa de tracción desmontable, permite cambiar de conector (compatibles: Stronglight 2.0, Twistlock 12, Largueur Skijoring)
• Bandas reflectantes de alta visibilidad para mayor seguridad
• Incluye una bolsa de almacenamiento de malla
• Compatible con la normativa internacional.

Correas compatibles:

✔ Crosser 1
✔ Crosslight
✔ Crossmax 1
✔ Twincross (requiere el uso de un mosquetón más resistente como el Stronglight 2.0 o Twistlock 12).

Mantenimiento y durabilidad

Un uso intensivo puede provocar el desgaste de la correa de tracción y del mosquetón Airlink. Estas piezas están disponibles como repuestos para prolongar la vida útil del arnés.

*Punto de anclaje deslizante: Permite que la correa se deslice libremente sobre la correa de tracción, evitando que el arnés gire durante los cambios de dirección del perro. Un punto de anclaje fijo, en cambio, mantiene la correa en el centro e impone al corredor absorber los movimientos del perro.